Superman Year One (2019)

Publicado bajo el sello Black Label dentro de DC cómics, a cargo de Frank Miller en el guión y John Romita Jr. En el arte del cómic Prestige 8 1/2 x 10 7/8 (un tamaño mucho más grande de lo que venimos acostumbrados en esta línea) con una extensión de 64 páginas aproximadamente por cada uno de los tres números que compone esta serie.

Quería comenzar esta reseña con una pregunta que creo que nos hicimos casi todos cuando nos enteramos que la historia detrás de estos tres números a cargo de Frank Miller sería una historia de origen sobre el hombre de acero, la pregunta es la siguiente ¿necesitábamos otra historia de origen de Superman? Y la respuesta por lo menos para mí es NO, ¿Por qué? Porque creo que la idea de este sello es poder contarnos historias de nuestros personajes favoritos de DC fuera del arco argumental actual (fuera de la continuidad original) y crear una historia de origen a mi parecer es algo que ya está más que usado y visto dentro del universo de Superman, yo por lo menos esperaba otro tipo de historia, además del hecho que unos meses antes tuvimos Man and Superman a cargo de Marv Wolfman que es un ejemplo de cómo contar una historia de “origen” sin caer en los mismos conceptos de siempre algo que Superman Year One no supo hacer.

La historia comienza a narrarse en Krypton, puntualmente comienzan a narrarnos la muerte del planeta desde la perspectiva de Kal-El, tenemos la clásica secuencia de destrucción y el lanzamiento de la nave que lleva a Kal hacia la tierra lejos de su mundo de origen y su familia.

La nave de nuestro protagonista llega a la tierra cayendo en la zona de cultivo de la familia Kent, donde es encontrado por quien será su padre adoptivo Jonathan Kent, el encuentro se da entre estos dos de una forma en la que simplemente comparten miradas y parecen empezar a crear sus lazos familiares. Jonathan se lleva al niño y se lo presenta a quien será su madre adoptiva Martha Kent.

Hasta acá más de lo mismo en cuanto a la llegada del hombre de acero a la tierra pero la verdad que mientras leía estas páginas no podía evitar  distraerme pensando en lo horrible que me parecía el arte que eligió darle John Romita a esta serie (sé que este dibujante genera sentimientos encontrados, lo amas o lo odias) puntualmente en mi caso deteste el arte de estos números,  con proporciones corporales muy distintas, cabezas que no parecían encajar en sus cuerpos una completa decepción y tengo que aclararlo porque el arte de los cómics es una parte también fundamental para atrapar al lector (por lo menos para mí)  y en este caso es un completo fracaso.

Paso a paso vemos al niño Clark ir descubriendo su poder asombrándose junto a los que ahora son sus padres y mientras vamos avanzando página tras página vemos a Clark convertirse en un joven que tiene que comenzar a distinguir lo que está bien de lo que está mal (todo esto transcurre durante el periodo escolar de Clark) la escuela es parte fundamental del primer número donde La guerra del joven Clark contra los matones que se meten con sus amigos comienza. Tiene que resolver una situación en la que, no pudiendo usar su súper fuerza, debe poner un punto final.

Él se siente integrado en su mundo (en la tierra), pero hay ocasiones como esta en las que todo lo supera. Escucha los consejos de sus padres, haciendo siempre caso del consejo de que no se exponga. Ese mensaje tantas veces escuchado y cuestionado. Finalmente, desoye, en parte, esas palabras y usa sus habilidades, eso sí, controladas, para no dañar a sus compañeros, aunque claro no le despiertan ningún tipo de empatía. Incluso la serie se atreve a insinuarnos una situación en la que Lana quien ya apareció en estas páginas para ayudar a estos niños a exponer a los matones de la escuela; poniendo en peligro su integridad física ya que en una secuencia nos muestran como Clark la salva de una violación por parte de estos abusivos.

Con el tiempo esta amistad entre el joven Clark y Lana se convierte en lo que sería su primer amor, para este momento la historia se vuelve un poco lenta para mi gusto ya que se convierte en una especia de drama adolescente donde Clark tiene que decidir que quiere hacer con su futuro, ya cerrando el primer número Clark decide enlistarse en el ejército acabada su escolarización despidiéndose de quien fue su primer amor y sus padres.

Comenzando el segundo número de esta saga vemos la llegada de Clark al ejercito antes claro sus padres se despidieron de él, Martha le da el que será su Super traje en estos números, traje que fabrico con las mantas que envolvían a Clark en su llegada a la tierra.

Ya instalado en su cuartel vemos a nuestro héroe aclimatándose a su nuevo hogar tratando de no resaltar tanto sus habilidades comparadas con las de sus compañeros, pero si siendo uno de los mejore soldados. Número que la verdad me aburrió bastante, Clark descubre que tal vez ese no sea su lugar porque claro parte de su entrenamiento se basa en quitarle la vida a otro ser humano o sea matar, algo a lo que Superman no está dispuesto.

Tenemos un cambio abrupto de trama cuando Clark descubre una ciudad acuática en la que combate con un monstruo marino gigante salvando a la población de esa ciudad, claro es donde lo vemos usar su traje por primera vez, allí conoce a una joven sirena (vamos a decirle así) y al parecer tiene su segundo amor. Y si Clark decide abandonar el ejército y adivinen ¿a dónde se dirige? Si a Metrópolis  

Hacemos una pausa en este momento para decir que los dos primeros números me parecieron muy lentos de leer se me hicieron eternos algo que no me gusta para nada y lamentablemente el tercer libro no fue la excepción, pero sin duda es mejor que las otras dos partes.

Desde el primer momento, tiene un mejor ritmo que el número dos, con una secuencia extendida bastante buena en la que Superman salva a Lois Lane y se enfrenta a un montón de tipos de fuerzas especiales.

Lo que no me enloqueció fue el monólogo interno de Clark, carece de un sentido de nobleza y concentración. Hace comentarios sobre estar por encima de la gente de la Tierra, pero luego se refiere rápidamente a sí mismo como "solo un hombre". Para mí, uno de los aspectos más interesantes del personaje de Superman es el hecho de que no se ve a sí mismo como un dios o por encima de la humanidad, pero como un tipo simple y humilde que resulta ser el hombre más poderoso de la Tierra. Él ... más o menos, llega a ese punto acá, al menos de alguna manera, pero simplemente ... más o menos sucede. Y si a partir de acá parece que Miller se dio cuenta que estaba creando una historia de Superman y comenzó con incoherencias y poniendo personajes porque simplemente siendo una historia de Superman tenían que estar ahí.

Clark decide convertirse en periodista porque ... se supone que debe trabajar en el Daily Planet. Lex Luthor está tramando algunas travesuras porque ... él es Lex Luthor. Brainiac se presenta al final del juego porque ... él es Brainiac y claro tratándose de Miller, Kandor tenía que aparecer de alguna manera en esta historia.

Y claro no podía faltar la eterna rivalidad entre Superman y Batman que a mi aparecer hace su aparición forzada en esta historia por más de lo mismo tenía que estar porque nunca puede fallar una pelea entre estos dos.

No es la peor pelea de Batman y Superman que vi, aunque puede ser la más tonta. Es casi cómico en cómo se ve, con los dos personajes actuando como un par de idiotas. Batman suelta un poco de charla hilarante, y Superman efectivamente analiza la idea de que, si quisiera, podría terminar la pelea en un abrir y cerrar de ojos. Es una confrontación extrañamente sin vida que además se ve horrible y es imperdonable el descuido de Romita en el dibujo (ya de por si su dibujo me parece horrible) pero en estas páginas se nota el descuido en el escudo de Superman que cambia varias veces su tamaño incluso en la misma viñeta. Luego tenemos la aparición de Wonder Woman que es pura y exclusivamente para detener la pelea entre estos dos (si un fiasco total).

Tenemos un par de momentos más donde Clark interactúa con Lois y es intentado manipular por Lex, de hecho, todo culmina en una reunión agradablemente tensa entre Clark y Lex que es perfecta para estos dos enemigos mortales.

La historia que nos planteó Miller la verdad que lejos de ser innovador en cuanto al origen de Superman cayo en más de lo mismo pero muy mal narrado y hasta pareció forzado, claro que estas son mis impresiones sé que esta saga fue amada u odiada. Lamentablemente para mi esta saga fue decepcionante y por ahora no quiero ni tengo ganas de leer más de este tipo de historias.